¿Qué hacer cuando se rompe un electrodoméstico como una lavadora, nevera, secadora o lavavajillas? ¿Debería repararlo o comprar uno nuevo? A continuación, repuestos fagor online le traerá la solución.

Cuando el ciclo de vida de un aparato parece haber llegado a su epílogo, surge la pregunta de si proceder con el reemplazo o intentar repararlo. Según una opinión generalizada, comprar un electrodoméstico nuevo representaría la solución más conveniente en comparación con repararlo.

Sin embargo, también debe tenerse en cuenta que la reparación no siempre es la forma más barata, dado el costo de los repuestos y la mano de obra, a menudo lejos de ser bajo.

¿Qué hacer en estos casos?

Una buena regla general es evitar hacerlo usted mismo , especialmente cuando puede contar con centros de servicio afiliados que le proporcionarán las reparaciones necesarias utilizando repuestos originales. En cualquier caso, para entender cuándo realmente merece la pena reparar el producto o sustituirlo por uno nuevo, es fundamental evaluar su estado general.

Un electrodoméstico viejo, una vez reparado, podría dejar de funcionar en poco tiempo y, por lo tanto, la reparación aún sería antieconómica. En este caso siempre es preferible optar por la compra.

Además, debe tenerse en cuenta que un aparato de nueva generación ofrece varias ventajas, como un mejor rendimiento y una mayor eficiencia que, inevitablemente, conducirá a un menor consumo.

Finalmente, un electrodoméstico nuevo viene con una garantía, generalmente de dos años, y que a menudo se puede extender pagando un pequeño suplemento. Una oportunidad que te permite ahorrar dinero obteniendo reparaciones a largo plazo, para así poder contar con un producto que funciona en el tiempo.

Mi consejo

En primer lugar, cuando compra un electrodoméstico nuevo, especialmente si es grande como refrigeradores, lavadoras, secadoras, lavavajillas, si está disponible, siempre compre la extensión de garantía. Si el producto se rompe después de la garantía estándar de 2 años, no tiene que preguntarse si debe repararlo o comprar uno nuevo.

Recuerdo cuando en el pasado se rompió el aire acondicionado portátil, el aparato tenía 3 años y el compresor se rompió, con un presupuesto de reparación de 380 euros.

Tras los primeros momentos de desesperación, recordé que en el momento de la compra había comprado la ampliación de garantía a 5 años, 60 euros bien gastados lo que me permitió hacer reparar el aparato sin coste alguno.

Si el electrodoméstico está fuera de garantía, considera cuántos años tiene, cuál es su desgaste general y si comprar uno nuevo te podría ahorrar mucho dinero en tu factura gracias a una clase energética superior a la anterior.

En general, después de 6 años, en caso de rotura, es mejor comprar un electrodoméstico nuevo.